Andrés López - Fernando Chumaceiro: El futuro en las palabras de Fernando Chumaceiro
Siempre soñamos con construir el futuro a partir de un presente próspero. Pero cuando el presente nos es adverso, la capacidad de la persona para reinventarse y reconstruirse es la herramienta para caminar con pasos firmes y confiados.
Vive el instante en que la historia cambia de rumbo, en que muere un tiempo y nace otro.
Deseamos construir el futuro sobre la certeza de que todo saldrá bien, apostamos por lo mejor, por lo próspero y deseamos que la vida sea lo mejor posible. Sin embargo, para el venezolano la vida es de incertidumbre, donde la planificación es sustituida por el lema de aquel personaje de telenovela “como va viniendo vamos viendo.”
Los imprevistos y los cambios se aceleran uno tras otro. Lo que sucedió ayer, se olvida, no hay tiempo para pensar largamente en ello. Lo dice Fernando Chumaceiro:
“Venezuela vive el instante en que la historia cambia de rumbo, en que muere un tiempo y nace otro.” |
El venezolano despierta cada día con un gran símbolo de interrogación ante una historia que cambia constantemente. Su futuro, nutrido de pasado, será diferente como señala Fernando Chumaceiro:
“El futuro tendrá muchas cosas del pasado, porque nació en él, pero tendrá su propio rostro y en nada se le parecerá, porque responderá a otra concepción de la vida, a otra cultura.”
La Resiliencia
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“El futuro es inevitable. El pasado es indestructible. No todo en él es indeseable. Como quien recibe una heredad, los valores que le sean inherentes deberán sembrarse en la nueva fase, para que sean nutrientes de las nuevas cosechas que traerá el porvenir, el cual no es para el reposo, sino para el trabajo, para la búsqueda incansable de nuevas formas de convivencia social.”La nueva historia de Venezuela será escrita por sus verdaderos protagonistas y nos ayudará a entender el pasado de un país que se reconstruirá con las acciones de sus ciudadanos que comprenden que el futuro es de quienes despiertan con una conciencia limpia, y deseosos de salir adelante.
Esto dependerá de cada uno de los ciudadanos nobles de este país, trabajadores, capaces de reconstruir su presente, de retomar sus sueños y sembrar su futuro prometedor.