Andrés López - Fernando Chumaceiro: Escribo para encontrarme y soñar
En nuestra historia actual conviene seguir soñando.
Son preguntas profundas sin importar la edad en que se hagan, pues de vez en cuando conviene preguntarse porqué las circunstancias cambian, los tiempos cambian y las vivencias cambian.
Así Fernando Chumaceiro se preguntó:
“A estas alturas de mi vida empiezo a preguntarme, ¿por qué, para qué y para quién escribo? Me pregunto si será algún recóndito impulso para trascender hacia el prójimo o para dejar huellas, rastros y vestigios de mi efímera existencia.”
Preguntarnos nos hace reflexionar |
El corazón latiendo cada vez que encontramos nuestras verdades y reacomodamos el rumbo:
“… siembro en el camino las señales de mi rumbo, para que algún desconocido tenga la curiosidad de pensarme, de imaginarse navegando a sí mismo en el mar de mis angustias y en los derroteros de mis esperanzas.”En nuestra historia actual conviene seguir soñando
Y creando espacios para que el renacimiento sea dueño de un país que sueña en ser muy grande, saludable, próspero, libre y productivo. Donde la angustia, la desesperanza, el desarraigo, la despedida no sea una constante en cada habitante, en cada niño, en cada madre y padre, en la gran familia venezolana.
Y Chumaceiro sigue soñando, algunos dirán que ya no es fácil soñar, pero quien deja de hacerlo deja de creer y de crear oportunidades de crecimiento, deja de apostar por la vida, por la verdad, por el amor y por aquello que nos hace humanos, pero sobre todo venezolanos:
“He soñado desde niño una patria que no existe, aunque piezas de ella están regadas por toda su geografía; habita en el cerebro, en el corazón y en el alma de muchos de sus jóvenes. Ellos serán los orfebres de ese sueño, los apaciguadores de su angustia, los parteros de su anhelado alumbramiento.”En esa búsqueda interior, encontramos también nuestra esencia y nuestra razón de ser, eso por lo que luchamos, lo que hace que nos levantemos cada mañana, lo que nos mueve la vida. Encontramos nuestros afectos, lo que amamos y nos hace sonreír, con rostros de personas concretas, encontramos recuerdos vividos, lo aprendido y comprendido y también nos reencontramos con nuestra identidad e idiosincrasia.
"Caminamos con la convicción de que lo que viene es mejor" |
La pregunta inicial era ¿por qué, para qué y para quien escribo? Y así salta la respuesta
“Escribo, para no gritar, para no llorar por lo que veo y presiento… Escribo para compartir mis pensamientos, hijos de la tristeza y la soledad, con aquellos que, como yo, traemos desde la infancia el himno en la memoria y la patria en el corazón”
Y yo te animo a seguir escribiendo, pero si callamos, gritarán las piedras. (Lc 19,40)