Andrés López - Fernando Chumaceiro: Releer la historia cuando perdamos el rumbo

Hay venezolanos ilustres, que estando o no en la política o en la administración, han impregnado a sus actos de calidad humana

Simón Bolívar

Deseo comenzar citando una vez más a Fernando Chumaceiro:

"De la consigna del Libertador, Moral y luces, ha habido en Venezuela pocos ejemplos en el ejercicio del poder. Por desgracia, Bolívar ha sido bueno para citarlo, pero no para imitarlo, pues muy pocos gobernantes han actuado bajo esa consigna."

En la Venezuela actual cada vez es más necesaria citar al Libertador, en sus escritos, en sus acciones, para iluminar la acción y el pensamiento de los políticos encargados de dirigir los destinos del país.

Y como dice Fernando Chumaceiro: "virtud y sabiduría es una exigencia del poder. Virtud para que en el ejercicio de administrar los recursos, éstos sean conducidos para lograr el progreso y la prosperidad de todo un pueblo, sin que  se pierda nada en el camino. Y Sabiduría para tomar las mejores y más certeras decisiones para lograr lo primero."

"La virtud no es suficiente cuando la ignorancia gobierna, como no es suficiente la sabiduría cuando es esclava de la corrupción."

Moral y luces para ser mejores ciudadanos

José Antonio Páez

Nuestra historia está plagada de personas no muy virtuosas ni muy sabias que han estado frente al país. Recuerdo mis clases de historia cuando describían personajes como: manejó el país como una hacienda, manejó con mano dura, o cuando decían, él roba pero deja robar. Frase última que dio pie a esa frase parte de nuestra cultura: "¡A mí que me pongan donde hay!"

Pero hay también venezolanos ilustres como José Antonio Páez, Laureano Vallenilla Lanz, José María Vargas, Arturo Uslar Pietri, Rómulo Gallegos, Fernando Chumaceiro y otros que, estando o no en política o en la administración, le han impregnado a sus actos una calidad humana y un virtuosismo que hace pensar un país distinto, un ejercicio distinto.

José María Vargas

Porque gobernar no es un ejercicio fácil. No es aquello de yo mando y usted obedece, porque el venezolano no es así. El venezolano es el resultado de una mezcla cultural cada vez más amplia, pero en sus genes lleva la sangre del guerrero indígena, que no se conforma con poco o con obedecer.

El venezolano es gallardo, altivo, generoso, luchador y de espíritu indomable capaz de lograr sus sueños y de luchar por lo que desea para construir un futuro de amplios horizontes, para los suyos y los más cercanos. 

Y cito a Fernando Chumaceiro, quien cita a su vez al historiador Salcedo Bastardo:

"También con frecuencia encontramos personas que creen que gobernar consiste solo en impartir órdenes y en exigir obediencia, olvidando que las características fundamentales del pueblo venezolano son "una elevada pasión por la libertad, una larga búsqueda de la justicia social y un elevado sentido de la dignidad ciudadana", como alguna vez lo expresara el historiador J.L. Salcedo-Bastardo."