Andrés López: Fernando Chumaceiro, ejemplo de sencillez y visión humanista
"Maracaibo para mí es algo de lo cual yo me siento muy orgulloso, y me siento muy orgulloso en primer lugar por su gente, por su forma de ser, por la forma como el zuliano ama a su estado, y en el caso de Maracaibo, el estado y de forma muy fuerte la ciudad, yo soy maracucho, no dejo de ser venezolano por ser maracucho pero yo soy muy maracucho", dijo alguna vez en una entrevista este hijo ilustre del Zulia que lleva sobre si entre muchas virtudes ser reconocido como el primer alcalde electo a través del voto popular en la ciudad de Maracaibo.
El primer cargo político de Fernando Chumaceiro fue el de diputado
al Congreso Nacional, tras ser animado por sus profesores a
presentarse a elecciones bajo la tolda de Copei.
“Estuve apenas un año
porque mi esposa dio a luz dos veces y el sueldo no me alcanzaba para mantener
a mi familia desde Caracas. Antes de regresarme pensé que no podía irme sin
dejar algo tangible y promoví la creación de Corpozulia”.
Tras presidirla, el servicio público le
propuso un nuevo reto: la Alcaldía de Maracaibo, durante sus dos gestiones, en los periodos 89-93 y 93-96.
A sus casi 88 años de
edad sigue siendo un ciudadano con probidad, honestidad y lucidez. En lo
enrevesado de las aristas políticas, surgen los alcances de su tenacidad como
un gran venezolano y estadista del siglo XX.
Actividades
destacadas y reconocimientos
La ciudad que ama vio
cambios en los noventa y uno de ellos fueron los “chuma buses”, la
primera red de transporte con
la que contó Maracaibo.
En el año 2011, se
creó la Orden de Convivencia
Ciudadana “Fernando Chumaceiro”, que se otorgará a quienes
reúnan las condiciones de eso: de buen ciudadano.
El doctor Chumaceiro
siempre fue un fiel creyente de la "descentralización"
como una medida más justa puesto que otorga un mayor grado de libertad de sus
habitantes. Para él lo más importante de un país son sus ciudadanos por lo que
consideró siempre como un error que fuese el gobierno central, alejado de las
realidades locales, quien determinara el destino de los marabinos.
Este insigne venezolano como docente, escritor
y libre pensador continúa dejando huella por ese compromiso irrestricto con su gente. Ha demostrado en todas sus facetas la capacidad de acción de lo que debe ser un buen gerente.
"Lo que está en
mí, lo que yo trato de que esté en mí es que yo pueda servir para algo y en
especial para la gente que no tiene como lograr eso que quieren tener".



