Andrés López: Fernando Chumaceiro, orden de Convivencia Ciudadana
“Nunca está el hombre más erguido en
su dignidad,
como cuando se arrodilla ante Dios y pide, ruega e implora por los demás, por
los otros…” este ha sido uno de los tanto pensamiento que Fernando Chumaceiro ha dejado para reflexión de la colectividad.
Han sido muchos los que con cariño hablan de este
abogado, político, doctor en derecho, docente universitario y escritor, con una
inmensa estampa histórica que a viva voz en innumerables artículos y entrevistas han
publicado en diferentes medios de comunicación.
Sin embargo, no es el criterio del periodista o
escritor lo que cuenta al hablar de Chumaceiro, sino las múltiples cartas,
artículos y escrito que reflejan el inmenso cariño que muchos venezolanos le
tienen a este hombre y que además dejan ilustre muchas de sus frases, englobando
a una sociedad donde
el bien común en la colectividad es lo más importante.
Esto se puede evidenciar en una carta publicada en el
Diario La Verdad, donde se puede leer lo siguiente: “Tú fuiste alcalde cuando
yo gobernadora, luego competimos por cargos y, aunque veníamos de esquinas
diferentes, en aquel mundo más decente, nunca tuviste palabras altisonantes
contra mí. Siempre fuiste un caballero (uno de los últimos que aún me abre la
puerta del auto para que yo entre), culto, distinguido, enamorado de Maracaibo.
Ciudad que tenía un duende, decías con razón. Dimos lo mejor de nosotros y
somos los mejores amigos”.
Por estos años, esta tierra aún conserva hombres brillantes que han
llegado a enriquecer nuestra sociedad con buenas costumbres, construyendo un
mejor futuro para las nuevas generaciones.
